diumenge, 18 de novembre del 2018

Estallar

Creo que esta pareja
 han levantado la voz
A todos nosotros se nos ha ocurrido alguna vez que hemos hecho o dicho algo de lo que después nos hemos arrepentido, ¿qué hacer entonces?.

A veces le hemos levantado la voz a nuestra pareja, a un amigo, a un hijo, a un compañero del trabajo, etc., sin pensar en las consecuencias que ello nos puede acarrear y que a veces son importantes.

Lo que pasa después de levantar la voz
Sin reflexionar y sin pensar en los problemas con todos los que nos rodean hay que intentar reaccionar de una forma más racional y calmada controlando las emociones, sobre todo pensar antes de hablar o alejarte del lugar en el cual estas con cualquier escusa y así intentar ganar tiempo.

Hacer las paces NO es rendirse
A mí me ha pasado alguna vez, me he alejado y después he vuelto ya con los ánimos calmados. Son situaciones difíciles y no siempre consigues que salga bien, pero si te hubieras quedado quizá hubiera sido peor. Hay que reaccionar de una forma menos compulsiva aunque esto sea difícil.

Que pelea más importante!.
Una pelota
A veces el asunto no es importante y las personas que están contigo se quedan sorprendidas al ver tu forma de reaccionar, ya que la chispa que ha prendido nuestra ira hace que piensen que el asunto quizá tenga más importancia de la que ellos pensaban sin ser así.

Este perro y este gato,
después de pelearse,
acuerdan hacer las paces
Si se piensa en profundidad y con tiempo se observa si el comportamiento que hemos tenido ha sido el adecuado, o si debiéramos haber reaccionado de una forma menos impulsiva.

De todas las formas, las personas de tu alrededor, han de hacer un esfuerzo para comprender tu reacción y pensar con objetividad, así se puede encontrar una solución satisfactoria por ambas partes.

Se acerca La Navidad y organizamos encuentros familiares que a veces traen discusiones no esperadas…

No se debe ESTALLAR, pensémoslo antes de hacerlo

Mary Luz


1 comentari:

Miquel M. ha dit...

Ben segur que això ens ha passat sovint: davant d'una crítica, reaccionem amb indignació, i si llavors responem immediatament, la situació s'enverina. El millor remei és comptar fins a deu, abans de contestar.
La solució que ens proposa la Mary Luz també és molt útil: allunyar-nos, posar-hi distància. Quan un volcà està en erupció, el més prudent es fugir ben lluny de la lava.