Con la Navidad hace falta opiniones sobre las
mascarillas, pues hasta los Reyes Magos han de llevarlas puestas. Las estrictas
medidas de prevención para hacer frente a los innumerables contagios en las
casas, en la calle, en los colegios, en los trabajos, etc. hace que extrememos
las precauciones.
Se nos comunica constantemente la distancia
interpersonal, ventilar las habitaciones frecuentemente, higiene constante sin
olvidar que nuestros niños llevan tanto y tanto tiempo con la mascarilla puesta
durante todo el día. Muchas veces pienso que les debe de parecer que han nacido
con ellas puestas, lo ven como una cosa natural, se han acostumbrado tanto a
llevarlas que juegan en los parques con ellas puestas como si tal cosa… me
enternece comprobar lo claro que ven que hay que llevarlas siempre.
Dicen que hubo una niña que dijo ”no pasa nada, es mejor eso que morirse”, es increíble, cuanto y cuanto ha debido de escuchar a su alrededor, de los mayores, para opinar así.
Esperemos que dentro de unos años hablemos de esto como
de algo que pasó, pero por todo lo que comentan y dicen parece que va para
largo, incluso se escucha que se quedará para siempre (Dios no lo quiera).
De todas las formas hay científicos que opinan que nos
habremos de acostumbrar a convivir con el virus ya que si continua circulando
por el mundo tendremos que seguir vacunándonos como hacemos con la gripe, la
viruela, la varicela, la peste, el tétanos, etc., total que habremos de
aceptarlo y luchar contra él. Han de seguir investigando… y lo harán. Mientras
tanto… mascarillas y mascarillas y la gente de todo el mundo seguiremos soñando
con el final de la pandemia, algo que muchos ya vislumbramos gracias a las
vacunas.
No tiremos la toalla, ¿de acuerdo?
Mary Luz Eixarch
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